La caída de las ventas fuerza a GM a reducir otro 14% la plantilla

General Motors apretó ayer más la tuerca, con el anuncio de una nueva ola de despidos que afectará al 14% de los asalariados. El propósito es reducir a 63.000 empleados su plantilla global. Los despidos se acometerán en todas las regiones, en función de las condiciones de cada mercado. El nuevo recorte se hace público a una semana de que la compañía presente al Tesoro su plan de viabilidad.

El grueso de los despidos se producirá en EE UU -unos 3.400 empleos sobre una plantilla total de 29.500 asalariados-. Además, procederá a partir del 1 de mayo a una revisión a la baja de hasta el 7% de los sueldos de sus empleados en EE UU, que en el caso de los puestos directivos será del 10%. Los recortes son temporales y durarán hasta final de año. Para el resto de las zonas no se dan detalles.

En noviembre pasado, GM anunció que se deshacía del 30% de los asalariados en Norteamérica, a los que sumó 2.000 en enero. La automovilística justifica el nuevo recorte anunciado ayer por el desplome de la demanda, debido a las dificultades para acceder al crédito, la recesión y el alza del paro. "Estas difíciles decisiones son necesarias por la grave caída de las ventas de coches en todo el mundo y por la necesidad de garantizar la viabilidad a largo plazo", indica.

GM registró una caída del 11% en las ventas globales en 2008. El panorama para el año que acaba de comenzar es oscuro. La compañía anticipó en diciembre que procedería a ajustar la plantilla a las condiciones del mercado. Ahora debe presentar un plan de viabilidad para que la Administración que preside Barack Obama siga acompañando su adaptación, y evitar la quiebra. GM acaba de recibir un crédito puente de 13.400 millones.