Cevisama apuesta por la innovación para combatir la crisis inmobiliaria

Azulejos tan finos que permiten reformar el cuarto de baño sin necesidad de desescombrar. Pavimentos antideslizantes que incorporan anaranjados o amarillos para marcar zonas de riesgo en estaciones de tren. Baldosas que repelen el agua, inhabitables para cualquier bacteria o que imitan texturas metálicas...

Los expositores que han acudido a Cevisama, la feria del azulejo y los pavimentos cerámicos que abrió ayer sus puertas en Feria Valencia, optan por la innovación para intentar paliar los efectos del frenazo en seco que ha sufrido en España en sector inmobiliario después de una larga década de crecimiento desmedido.

Los responsables del sector recuerdan que el mercado nacional sólo consume el 40% de la producción total de una industria, que se concentra en un 98% en la provincia de Castellón. Pero la garantía de ese 40% ha sido el trampolín que ha disparado la industria nacional hasta adelantar por volumen de ventas a los productores italianos.

Los técnicos de Feria Valencia han volcado sus esfuerzos de promoción en los países árabes, Rusia y otros países de Europa del Este donde la construcción se sostiene. El porcentaje de extranjeros entre los visitantes que acudieron a la primera jornada de Cevisama era notable. Tanto como las plazas vacías en los aparcamientos de Feria Valencia que se abarrotaban en pasadas ediciones de la mayor exhibición que alberga el recinto ferial.