"Gutenberg inventó con el libro un objeto perfecto"

Con cuatro décadas como editor a las espaldas, Jorge Herralde (Barcelona, 1936) pronunciará el lunes la conferencia inaugural de la feria, que ha distinguido al responsable de Anagrama con el Premio Leyenda, que los libreros de Madrid conceden por primera vez. Herralde recuerda su primera visita a la cita del Retiro en 1969, "cuando los editores estaban cada cual en su caseta, tanto los madrileños como los de Barcelona".

"Eran tiempos", recuerda, "en los que la feria, todavía bajo el franquismo, era militantemente alcohólica, trasnochadora y fumadora en un ambiente cálido y más familiar". ¿En qué ha cambiado más la feria? "Bueno, creo que el aire era más amateur, tanto en el sentido positivo de aficionado como en el negativo de inexperto. Todo transcurría a una escala más humana y los contactos con autores y libreros resultaban constantes. La feria sufrió un bache en los noventa, cuando llegó a mercantilizarse demasiado con aquella locura de las listas de libros más vendidos o con un número excesivo de casetas. Ya en los últimos años, la organización ha jugado a favor de los visitantes, como los principales destinatarios del esfuerzo. Ahora tiene una atractiva combinación de fiesta y de cultura".

Herralde cruza los dedos cuando afirma que todavía no ha notado los efectos de la crisis económica. "El crecimiento es menor de lo previsto, pero en estos meses de 2008 no hemos acusado un descenso. En España se venden más ejemplares que nunca, el libro resulta un artículo barato y la oferta de bolsillo es tan amplia y variada que nadie puede alegar que no lee porque no tiene dinero". Se muestra optimista sobre el futuro del libro en soporte de papel. "Gutenberg inventó un objeto perfecto que perdurará", dice.