"Sigo teniendo muchas dudas"

Hubo un cierto revuelo en las dos sesiones de entrenamientos libres de ayer en el Gran Premio de España de F-1. Tras las pruebas que se habían llevado a cabo en este mismo trazado hace sólo una semana, todos estaban pendientes de hasta dónde podían llevar a Fernando Alonso las mejoras introducidas en el R28. En la segunda sesión dio la sensación de que el salto era importante. Nelsinho Piquet y Alonso colocaron sus dos Renault por detrás únicamente de Kimi Raikkonen, a menos de una décima de segundo del Ferrari. Sin embargo, el piloto español echó de nuevo un jarro de agua fría sobre todas estas expectativas.

"Estos tiempos no reflejan las mejoras ni nada", afirmó Alonso, que durante la tarde decidió cambiar el monocasco, la parte central del coche, de su R28. "Está bien para la moral del equipo haber colocado nuestros bólidos en la segunda y la tercera posición. Pero, 20 minutos antes del cierre de la sesión, yo era el 15º y rodábamos según el programa previsto. Entonces pusimos neumáticos blandos a los dos, los vaciamos de gasolina y logramos nuestros mejores tiempos".

"Sigo teniendo muchas dudas", prosiguió Alonso; "quiero saber exactamente dónde estamos. Seguiremos luchando por la séptima o la octava posición y nos pelearemos con Toyota, Williams y Red Bull. El coche responde bien y la mejora es evidente. Igual nos clasificamos fácil para la Q3".

Alonso luchará hoy por entrar entre los diez primeros en la parrilla de salida del domingo mientras otros dos españoles vieron peligrar su participación en GP2. Roldán Rodríguez y Adrián Vallés presenciaron como los mossos comunicaban a Fisichella Motor Sports que habían recibido una demanda judicial de su ex piloto Andy Soucek, también español, a quien rescindieron el contrato pocos días antes del comienzo del campeonato. El equipo recibió una oferta por patrocinios de Rodríguez superior a la de 1,2 millones de euros de Soucek.