Rumania en acción

Estas Fallas se presentan un tanto exóticas. Al menos, lo será la madrugada de hoy día 18. Los macro-conciertos van a verse sustituidos por las grandes sesiones de club, en los que los mandos de las cabinas están bajo manos muy bien pagadas y que destacan en Europa durante los últimos meses. Barraca trae para ello al poderoso italiano Marco Carola, un disc jockey versado; también añade a Mar-T, residente del Amnesia de Ibiza -e hijo del dueño de ese club-, que cada vez tiene más calado en el universo del baile. Y redondea la jugada con Raresh, el último hombre de moda en la electrónica, el mascarón de proa de los pinchadiscos rumanos que están cambiándolo todo, demostrando que el Este puede llegar a ser moderno y radical, pese a los tópicos. De hecho, en los últimos tiempos Rumania se ha convertido en algo similar a lo que hace un par de temporadas fue Chile: aire fresco, mestizaje y sabores imprevistos para el tecno menos obvio, aquel en el que pesa más la insinuación y el susurro que la caña salvaje. Aunque eso no quiere decir que estos pinchadiscos hagan ascos a la fiesta, más bien al contrario. Raresh es de hecho la última apuesta de Cocoon, la promotora internacional más famosa y excesiva de todas cuyo jefe es el extremo pinchadiscos alemán Sven Väth. Una auténtica Nit del Foc en la pista para gente que quiera algo más que verbenas.