Vivenda se opone al trayecto del AVE sobre un nuevo parque industrial

La Consellería de Vivenda e Solo ha presentado una alegación al trazado del tren de alta velocidad Ourense-Vigo a su paso por O Carballiño, que amenaza un nuevo parque empresarial promovido por el departamento de Teresa Táboas. Dos de las cuatro alternativas previstas para el paso del AVE por O Carballiño atraviesan el parque, precisamente las dos por las que se pronuncia el estudio informativo para el proyecto de la línea entre las ciudades de Ourense y Vigo.

Vivenda recuerda al ministerio su posición favorable a las líneas de altas prestaciones para Galicia, "por ser un elemento estratégico e imprescindible para su desarrollo", pero reivindica una planificación que evite pérdidas económicas innecesarias. La elección de un trazado que afecte al parque empresarial "ocasionaría importantes perjuicios económicos y sociales al tejido empresarial de la comarca", argumenta Táboas.

El parque de O Carballiño entró en funcionamiento recientemente y su ampliación está en fase de ejecución por parte del departamento autonómico de Vivenda. La consellería considera que las otras dos opciones, que salvan el paso de O Carballiño por el norte, causarían un menor impacto para la comarca, mientras que su coste sería "mucho menor, tanto en lo que atañe a la ejecución de las obras como a la adquisición de los terrenos necesarios para llevar a cabo la actuación".

En la alegación de Vivenda se aboga por lo tanto por las dos alternativas que no afectan al parque empresarial de O Carballiño, una localidad que, según recuerda la consellería, "depende en gran medida de la actividad que genera" el nuevo suelo industrial, por lo que la posible afectación por el trazado del tren causaría "una pérdida importante de puestos de trabajo".

592 puestos de trabajo

A este respecto, la consellería de Teresa Táboas alega que, de llevarse a cabo el trazado conforme a lo propuesto por el estudio informativo, supondría la pérdida de la implantación de 16 nuevas empresas, que se instalarían en la segunda fase del parque empresarial de Carballiño, que está a punto de inaugurarse, y a otras 33 ya instaladas. Todo ello implicaría la pérdida de 592 puestos de trabajo directos, según los cálculos de la consellería.

Vivenda también alega las pérdidas económicas que supondría el proyecto para la Administración, ya que la inversión ejecutada en la segunda fase del parque empresarial para la adquisición y urbanización de terrenos asciende a 3,7 millones de euros. La superficie de esta parte del proyecto asciende a 87.660 metros cuadrados. El parque de Carballiño tiene ahora una superficie total de 341.395 metros cuadrados, de los cuales se destinan a uso industrial y comercial 241.230 metros, distribuidos en 49 parcelas. El resto de la superficie se destina a equipamiento social y deportivo, zonas verdes, sistema viario y aparcamientos.