Babelia Ver, leer y pensar

S er profundos sin dejar de ser claros. La vieja pretensión de los clásicos es también la que impulsa la renovación del suplemento cultural de EL PAÍS, que se publica cada sábado. Fruto natural del interés por la cultura que está en el propio origen del periódico, Babelia recoge la herencia de los diversos suplementos de libros y artes que el diario ha tenido casi desde su fundación. El número 831 de Babelia, que verá la luz el próximo día 27, será el primero de una etapa marcada por el nuevo desarrollo de las secciones habituales -dedicadas a los libros, el arte, la arquitectura, el teatro y la música- y por la atención a ámbitos de la cultura como el diseño, el cine, el cómic o la danza. Toda la cultura cabe en Babelia. Y lo hace a lo largo de un mayor número de páginas y dentro de un ambicioso proyecto gráfico, del que se ha encargado el diseñador Óscar Mariné y en el que conviven la información puntual, la opinión y los textos de largo recorrido, con una gran atención a la imagen.

En un tiempo en el que la fugacidad y la desmembración de los contenidos parece la tendencia dominante, Babelia subraya su apuesta por el análisis total, detallado y demorado, de obras y tendencias. Conciliando información e interpretación, el nuevo suplemento cultural aúna la creación y la crítica sin renunciar a ninguno de los géneros del periodismo: de la entrevista a la reseña pasando por el reportaje, el perfil o la crónica. Además, poemas, relatos y fotografías. Páginas para ver y leer. Y para pensar. Como un sismógrafo que en la vanguardia de hoy detecta a los clásicos de mañana. Sin olvidar la dimensión universal, babélica, de las artes, pero con especial atención a la creación en español y una opción preferente por Iberoamérica. Toda la cultura desde todos los puntos de vista posibles.