Abre en Lugo un bar con consumiciones de oxígeno

Hace tres semanas, Susana Vilela abría en Lugo el quinto bar de oxígeno de toda España, tras los de Valencia, Barcelona, Madrid y Vigo. La idea surgió a partir de la iniciativa personal de la propietaria, quien vivió muchos años fuera y apreció el tirón que estos establecimientos tienen, especialmente en países como Holanda. La industria del oxígeno está arrancando en España, donde además de las cinco tiendas hay dos distribuidoras, pero ya está plenamente asentada en territorios como los Países Bajos, de donde procede la materia que suministra el Oxy&Su.

Un sillón espera al consumidor, a quien le van a colocar en los orificios nasales cánulas asépticas e individuales, similares a las empleadas en los hospitales. A través de ellas recibirá el oxígeno procedente de un generador que va a un difusor donde hay agua destilada con un aroma. Este olor llega a la tienda en pequeños botes y en forma de polvo concentrado.

Al principio de la sesión, el cliente escoge el aroma que desea de entre un menú que ofrece olores calmantes, dulces, euforizantes, drenantes, exóticos, armonizantes, relajantes y reconfortantes, de forma que durante 15 minutos el usuario inhalará oxígeno combinado con la fragancia escogida. Es posible seleccionar hasta cuatro aromas y mezclarlos entre sí o alternarlos, si bien lo mejor es ir del más suave al más fuerte, según Susana Vilela. Por el momento, sobresalen entre los más demandados el Tangerine Dream, un olor a mandarina escogido por sus propiedades armonizantes y el Lemongrass, un reconfortante fijo en todos los tratamientos.

El rendimiento óptimo se obtiene cuando se prolonga en el tiempo la ingesta de oxígeno aromatizado, por lo que en el Oxy&Su ofrecen bonos de 10, 20 y 30 sesiones, aparte de tratamientos desestresantes, drenantes y energizantes. El oxígeno permite que el cliente reduzca arrugas, pierda peso, elimine estrías y celulitis, se desestrese y active la circulación, entre otros beneficios, según Susana Vilela.

El éxito de este bar es tal que la propietaria ya ha encargado nuevos olores, de tipo "lúdico", pensados para que el consumidor se recree, y no con fines terapéuticos como los actuales. Vilela resalta que en principio el bar no era más que "un factor adicional", pero es lo que más atención está atrayendo de su tienda.