La violencia callejera deja en Vitoria cuatro coches quemados

Todo apunta a que los violentos del entorno de ETA (kale borroka) son los responsables de la quema de cuatro vehículos en Vitoria la madrugada del domingo. Aunque la Ertzaintza no confirmó oficialmente sus sospechas, fuentes de la misma lo hicieron ayer a Europa Press. El incendio en los coches lo causaron dos artefactos pirotécnicos colocados bajo dos de los vehículos. Los ataques se producen en el primer fin de semana tras la detención, el pasado martes, del "núcleo dinamizador" de la violencia callejera en Álava.

El primer incendio fue causado por un artefacto incendiario colocado bajo un Citroën C4, propiedad de una empresa, que estaba aparcado en la calle Ihurraldea, en el barrio de Lakua. El fuego, iniciado a 01.40 de ayer, quemó completamente tanto este vehículo como un Nissan Micra que se encontraba aparcado a su lado y provocó daños en una persiana de una vivienda cercana. Hasta el lugar del atentado se trasladó una unidad de desactivación de explosivos de la Ertzaintza. Los agentes hallaron evidencias de un artefacto pirotécnico y líquido inflamable.

Apenas siete minutos después se registró un incidente similar en la calle de Barcelona, también en Vitoria, donde ardieron hasta quedar destrozados dos vehículos. El origen del fuego estaba en una furgoneta Ford Transit con rótulos de la Caja Vital, pero que ya no pertenecía a la entidad financiera. El segundo coche destrozado fue un Fiat Tipo. Hubo un tercer vehículo que resultó levemente dañado. En el lugar fueron hallados dos aerosoles utilizados para provocar el incendio.

"Núcleo dinamizador"

La quema de coches se produce cuatro días después de la detención en Vitoria y Salvatierra (Álava) de Gorka Velasco Larequi, Koldo Moreno Fernández, Xabier Fernández de Gamarra Alutiz y Urko Arroyo López de Erentxun, dirigentes de la autodenominada kale borroka, en una operación que el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, calificó de golpe al "núcleo dinamizador" de la violencia callejera en Álava durante los tres últimos años.

El juez Baltasar Garzón envió el jueves a prisión a tres de ellos y dejó al otro en libertad con cargos. Los encarcelados tienen entre 20 y 21 años y están acusados de integración en banda armada y estragos.

Por otro lado, los dos etarras detenidos el miércoles cerca de Angulema (oeste francés), cuando transportaban en una furgoneta sustancias que pueden servir para hacer explosivos, fueron procesados ayer en París por asociación de malhechores con fines terroristas y otros cargos, informaron a Efe fuentes judiciales. Se trata de Iker Mendizabal y José Juan García González, a los que el Ministerio español de Interior relaciona con la dirección logística del aparato militar de ETA. Los dos hombres, que habían sido trasladados de Angulema a París el viernes, fueron imputados por la juez antiterrorista Laurence Le Vert antes de comparecer ante un magistrado de las libertades y la detención para que se pronunciara sobre su ingreso en prisión, solicitado por la fiscalía y la juez instructora.

Además de por asociación de malhechores con fines terroristas (delito penado con hasta 10 años de prisión), los dos etarras han sido imputados por tenencia ilícita de armas, municiones y componentes de explosivos, por receptación de robo en banda organizada y por documentación y matrículas de coche falsificadas. La imputación por receptación de robo "en banda organizada" hace que sean juzgados por el Tribunal Especial de lo Criminal de París y no por el Correccional.

Mendizabal y García, ambos con documentación falsa y que tenían en la furgoneta varios juegos de falsos documentos de identidad españoles, llevaban una pistola y un revólver. Esta arma procedía del robo de unas 350 pistolas en un almacén de Vauvert (sureste de Francia) por un comando de la banda el pasado octubre. Los dos etarras, de 30 y 37 años, están procesados por la Audiencia Nacional. Hasta el momento, la policía no ha encontrado el lugar donde se alojaban. Se cree que se hospedaban en albergues rurales y que se mudaban con frecuencia. En la furgoneta había sacos de dormir.

A lo largo de los últimos seis meses la policía ha reducido a la mitad a los treinta miembros del aparato militar de ETA creado por Garikoitz Aspiazu, Txeroki.