Dos ex ejecutivos de Siemens admiten que dieron sobornos a Enel

Más de seis millones en sobornos por encargos de 450 millones. Los acusados Andreas Kley y Horst Vigener, ex ejecutivos de Siemens, reconocieron ayer en la primera sesión del juicio que dos ejecutivos de la eléctrica italiana Enel se embolsaron dicha cantidad para que Siemens obtuviera contratos millonarios entre 1999 y 2002. Los acusados declararon que era una práctica corriente en Siemens, donde varios sistemas de cuentas secretas sirvieron durante años para sobornar a ejecutivos de otras empresas o a políticos en medio mundo.

El abogado de Vigener explicó ante el tribunal de Darmstadt que Siemens no ofreció el dinero a los ejecutivos italianos, sino que éstos se negaron a firmar el contrato ya preparado si no cobraban el 4% de su valor total. Según su testimonio, el acusado regateó hasta convenir la suma final de seis millones. El pago no era ningún secreto para "muchas personas" dentro de Siemens, dado que la empresa sobornaba en varias regiones del mundo. Razonó Vigener que "no es fácil obtener un contrato".

Por su parte, Andreas Kley rechazó la acusación de desfalco, porque "el dinero sirvió a Siemens para entrar en el mercado italiano", de modo que sirvió bien a la empresa. Cosa aún incierta, puesto que la cantidad obtenida por Siemens gracias a estos pagos podría terminar en las arcas públicas según sentencie el tribunal.

No terminan aquí los problemas del gigante alemán de la tecnología. Además de las escandalosas investigaciones por sobornos y desfalcos masivos aún en manos de la fiscalía de Múnich, un diario alemán informó ayer de que la fiscalía de Núremberg investiga el pago de casi 15 millones a miembros del comité de empresa para acercarlos a las posiciones de la directiva.