Pocos afectados por Renfe

El barómetro municipal incluye una serie de preguntas fijas, siempre las mismas, y otra variables elegidas al hilo de la actualidad. En el caso de la encuesta hecha en diciembre, las preguntas incluidas versaron sobre las reiteradas averías que afectaron al servicio de trenes de Cercanías y sobre la promesa de José Montilla, primero, y de Jordi Hereu, después, de hacer que el metro preste servicio ininterrumpidamente durante una noche de las dos del fin de semana.

Los barceloneses usan poco los trenes de Cercanías de modo que apenas se vieron afectados por las averías. Sólo el 12,3% asegura haber sufrido las consecuencias de los problemas de Renfe o tener un familiar que se viera afectado.

El 52,1% sostiene que los problemas derivan de la escasa inversión realizada en la red ferroviaria en los últimos años; el 21% lo atribuye a mala planificación y sólo el 10,3% lo relaciona con las obras del tren de alta velocidad. La mayoría (61,9%) se declaran convencidos de que el servicio mejorará cuando sea traspasado a la Generalitat.

También es mayoritaria la opinión de que el metro debe funcionar durante las noches del fin de semana. El 85,4% considera este servicio necesario o muy necesario. La opinión está dividida entre quienes prefieren que la apertura se haga en la noche del viernes al sábado (34,1%) y quienes preferirían que abriera la noche del sábado al domingo (40,9%). Sólo el 4,9% dice que el metro debería abrir ambas noches.

Pese a ello, casi el 44% de los encuestados aseguran que no lo utilizarían en ninguno de los dos casos. Los que sí viajarían en metro de noche de forma habitual se sitúan en torno al 20%, mientras que el 32% afirma que si el metro abriera en viernes o sábado por la noche lo utilizaría "de vez en cuando".