Carles Francesc visualiza en 72 fotografías urbanas una relectura de la ópera 'Fidelio'

El fotógrafo valenciano Carles Francesc estrenó ayer el Palau de les Arts como sala de exposiciones al presentar un conjunto de 72 imágenes en las que recrea de manera libre la historia de amor que relata la ópera Fidelio, de Beethoven, que se estrena esta noche en el teatro. Art per la llibertat. Llibertat per a l'art es el peculiar nombre de la muestra que propone un recorrido por el libreto de la ópera a través de una selección de fragmentos que Carles Francesc ha visualizado con su cámara.

Las imágenes, ubicadas en el gran vestíbulo, han sido extraídas de la vida cotidiana y en ellas flota "el drama", según explicó el autor. El aislamiento, la soledad y "otro tipo de tiranía más sutil", como puede ser la publicidad, aparecen en instantáneas que reproducen las cafeterías, el metro, los escaparates de las tiendas, los vendedores ambulantes y los sin techo, entre otros. También hay lugar en esta muestra para el amor -motor de Fidelio- y que se simboliza con su representación "más universal, el beso", apuntó Carles Francesc, fotógrafo de EL PAÍS.

La exposición, que acaba el 24 de noviembre, forma parte de ValènciaFotogràfica2006, proyecto promovido por el Muvim

Además, Juan Ángel Vela del Campo abrió el ciclo de conferencias y actividades en torno a Fidelio. El crítico de EL PAÍS planteó algunas cuestiones capitales de esta obra en la que Beethoven despliega el magnetismo de su música, aunque la ópera no era su mundo. En ella, los personajes son más ideológicos y morales que de carne y hueso. El especialista también propuso un recorrido a través de cinco versiones discográficas sobre cinco pasajes de la obra que desarrolla el tema de la libertad. Vela del Campo señaló las dificultades de hacer un Fidelio en nuestros días. Es una obra muy estática, con un desequilibrio en el tratamiento de músicos, voces y escenas, y una carga sinfónica de mucho peso. "Su música es imponente, pero la obra es desigual", concluyó.