Zapatero confía en un "final razonable" que respete los intereses de España en materia energética

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, augura un final razonable al complejo proceso de las OPA sobre Endesa, aunque elude concretarlo: "El final va a depender de las empresas, de los accionistas y también del Gobierno, evidentemente", aseguró ayer en la sesión de control al Ejecutivo del Congreso de los Diputados.

Zapatero respondía al portavoz parlamentario de Convergència i Unió, Josep Antoni Duran, que le interrogó sobre la posibilidad de un final feliz en la OPA de la alemana E.ON sobre Endesa. Habrá "un final razonable, si usted quiere feliz, que lógicamente tendrá distintas valoraciones", respondió a Duran. Zapatero subrayó que se adoptará una solución que concilie los intereses estratégicos de España en energía, las consideraciones que ha hecho la Comisión Nacional de la Energía y el interés de los consumidores. El Gobierno, añadió, "cumple con sus responsabilidades y competencias según las leyes europeas, nacionales y los intereses en juego".

Los argumentos de Zapatero fueron reforzados por el recién nombrado ministro de Industria, Joan Clos. El nuevo titular se estrenó en el Congreso respondiendo a preguntas sobre E.ON y subrayando que el Gobierno considera positivo contar con empresas energéticas fuertes y competitivas. "Creemos que es importante que nuestro país tenga empresas de primer nivel", aseguró.

Clos arremetió contra la estrategia del Partido Popular en esta operación, al acusar a esa formación de utilizar la OPA "para intentar erosionar al Gobierno sin tener en cuenta las consecuencias de tal iniciativa política". El Ejecutivo garantizará el suministro eléctrico, la libre competencia y la protección de los consumidores. "Eso sí que es innegociable", zanjó.

El portavoz de CiU reprochó al Gobierno sus gestiones y lamentó que este conflicto "derive en la deslocalización de un sector básico, como es el energético". "Todo este proceso lo han hecho mal desde el principio hasta el final", le espetó a Zapatero. Duran responsabilizó de la crisis al ex ministro de Industria, José Montilla, ahora candidato socialista a la Generalitat catalana.