Telefonear a bajo coste o incluso gratis

Mucho se habla de las redes P2P (del inglés peer to peer, entre amigos) como manera de compartir archivos, películas o descargar el último CD de moda. Pero este tipo de redes no sólo tiene estos usos, sino otros muchos desconocidos para el público en general. Uno de ellos es la telefonía p2p, una tecnología que utiliza las redes de Internet y sus millones de nodos para lograr la comunicación. Eso ha supuesto una revolución en todo el universo de las telecomunicaciones.

Hasta hace poco, y aunque las tarifas telefónicas hayan bajado drásticamente, realizar una llamada a un país lejano suponía estar controlando el tiempo de conversación para no hacer un roto a la economía doméstica. Con la llegada de Internet y sus aplicaciones, realizar esa misma llamada puede resultar incluso gratis. La tarificación por distancia y tiempo, la habitual de las operadoras tradicionales, tiene los días contados.

Y si hay una aplicación que por implantación y uso generalizado se ha convertido en el estándar de este tipo de comunicaciones es Skype. Comprada recientemente por el portal de subastas eBay, cuenta con más de 55 millones de usuarios en todo el mundo.

Para usar este programa, y previo registro, sólo hay que descargarlo (está disponible para todos los sistemas operativos) y enchufar al ordenador unos altavoces y un micrófono.

Si las llamadas que se van a realizar son a teléfonos convencionales (fijos o móviles), habrá que comprar crédito de antemano, al estilo de una tarjeta prepago. De ahí se irán cobrando las llamadas realizadas.

Si el destinatario de nuestra llamada también tiene instalada la aplicación, la comunicación será gratis, esté donde esté, mientras que si la llamada se realiza a un número de teléfono convencional, las tarifas serán ridículas en comparación con las actuales. Por ejemplo, estar hablando desde España con cualquier ciudad de Japón durante una hora entera cuesta mediante este sistema 1,32 euros.

Pero no sólo existe Skype para este cometido.

Jajah también ofrece este servicio, pero con la particularidad de que no hay que usar cascos ni micrófonos. Sólo se utiliza Internet para decirle a este servicio el número de teléfono al que se quiere llamar. Hecho esto, se recibe una llamada al teléfono propio y una agradable voz nos indica que la conexión se está realizando.

Tiene, por tanto, la ventaja de que no hay que instalar software en el ordenador; tan sólo disponer de una conexión a Internet y un navegador.