Una agente fija y otra de apoyo custodian de día el centro

Entre los 25 funcionarios del Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE) de Capuchinos sólo hay una mujer. "Allí trabaja una funcionaria fija y otra va rotando cada mes", indicó Manuel Beaín, del Sindicato Unificado de Policía (SUP). La agente cubre las mañanas y las tardes de lunes a viernes, pero no hay ninguna responsable de vigilancia en las instalaciones ni por las noches ni durante los fines de semana, a pesar de que el centro tiene capacidad para 25 internas.

Los sindicatos policiales han presentado cinco informes ante la Comisaría Provincial para pedir más mujeres trabajando en el CIE, según Francisco Puertas, de la Unión Federal de Policía (UFP). Puertas asegura que han denunciado las "coacciones" sufridas por los agentes y las dificultades para atender a las inmigrantes "de forma verbal y por escrito". Hoy pedirán la mediación del Defensor del Pueblo andaluz, José Chamizo, para que la Comisaría Provincial aumente el número de funcionarias en el centro de forma definitiva.

También solicitarán a los agentes del centro "que no entren en las dependencias del CIE para nada", según Beaín. Puertas aseguró que la propia Comisaría ha ordenado a los funcionarios que trabajan en Capuchinos que no atiendan a las inmigrantes a partir de las diez de la noche y que soliciten a la sala del 091 que les envíe una agente cuando las internas necesiten algo.

La Plataforma de Solidaridad con los Inmigrantes de Málaga, que pretende personarse hoy como acusación popular en el caso, reclama desde 1996 que la custodia de las internas se encargue a funcionarias civiles "dejando a las fuerzas de seguridad sólo la custodia externa del perímetro, al igual que ocurre en los centros penitenciarios", según un comunicado de la organización.