El oro de la tercera edad

Cada vez hay más ancianos en España. El envejecimiento de la población -los mayores de 65 años ya suponen el 17% del total- está impulsando numerosas áreas de negocio impensables hace pocos años. Uno de esos sectores estrella es el de las residencias privadas para la tercera edad. Cajas de ahorros, inmobiliarias, sociedades de capital riesgo, entidades de seguros médicos... Todos coinciden en apuntarse a ese dorado negocio, cuyo segmento alto está creciendo a tasas del 12% anual y que, además, contempla decenas de centros con miles de nuevas plazas en construcción. "No hay mes que no se inauguren dos o tres", apunta Rafael Navas, presidente del Grupo Jubilo. "Ahora puede haber unas 700 en marcha".

La nueva actividad, que se ha disparado a partir del año 2000, según Javier García Perrote, de Euroresidencias, se centra en la gestión de centros lujosos, de 100 a 200 habitaciones, dirigidos a personas dependientes, con más de 80 u 85 años. Si en el año 2001 existían unas 3.400 residencias de este tipo ahora ya son 5.400. En unos años se llegarán a las 7.000 u 8.000.

Ahora mismo, las trece empresas más grandes del sector cuentan con un parque de casi 30.000 habitaciones, el 12% del total, y logran retornos del 10% o del 12% sobre las ventas, lo que convierte la gestión de estos hoteles -la estancia en estos centros cuesta entre 1.600 y 3.000 euros al mes- en un negocio bastante atractivo, que factura unos 2.400 millones de euros al año, un 53% más que en 2002.