El niño en coma de Mallorca ya sufrió lesiones en 2002

El niño de seis años que se encuentra en coma profundo desde hace cinco días en Mallorca por presuntos malos tratos de los que el juez ha imputado a sus padres adoptivos -con auto de prisión para la madre y orden de alejamiento al padre- ya fue ingresado en enero de 2002 por una lesión traumática. Tenía entonces dos años y llevaba seis meses con su familia adoptiva, que le llevó al hospital Son Dureta de Palma por una supuesta caída.

Los médicos asumieron el relato familiar de que se trataba de un accidente infantil y los servicios sociales del Consell de Mallorca, que controlaban la adopción, no investigaron lo ocurrido. Dieron por bueno que se trataba de un hecho fortuito, y no "de un acto violento", señaló ayer un portavoz del Consell. "No era el primer niño que se cae y se rompe un brazo", añadió. En aquel momento, el proceso legal de adopción estaba sin culminar. Finalizó en 2003 con informes de seguimiento favorables de los servicios sociales del Consell.

Por su parte, el departamento de Educación de Baleares ha afirmado que no le constaba que el tutor y una profesora del colegio público al que asistía el pequeño hubieran comunicado oficialmente que éste tenía moratones que podrían indicar maltrato.

En su declaración judicial antes de ser encarcelada, la madre adoptiva del niño asumió que pudo empujarle y golpearle por su mal comportamiento como estudiante. El padre asegura que desconocía las agresiones a su hijo perpetradas supuestamente por la progenitora. El juez le dejó en libertad con cargos y ha dictado una orden que le obliga a alejarse del pequeño.