Bachelet invita a España a contribuir al desarrollo chileno

Desarrollo económico y cohesión social son los pilares de la política de Michelle Bachelet, presidenta de Chile desde el pasado 11 de marzo -la primera mujer en ese país suramericano que ostenta la jefatura del Estado-, y para lograr esos objetivos ha invitado a los empresarios españoles a contribuir con sus inversiones. La dirigente chilena expuso ayer en Madrid los principios básicos de su política.

Bachelet recibió de manos de la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, el Premio Nueva Economía Fórum 2006, por su "trayectoria y carisma de estadista", en un acto celebrado en un céntrico hotel de Madrid con asistencia de políticos, empresarios y diplomáticos.

La vicepresidenta glosó la figura de Bachelet, por quien mostró "gran admiración y respeto" y a quien definió como hija de la revolución y del exilio y mujer que, pese al sufrimiento personal y familiar durante la dictadura de Pinochet, "ha derrochado generosidad".

La presidenta chilena expuso las prioridades de su Gobierno durante los próximos cuatro años e hizo un guiño a las empresas españolas, y también a las extranjeras, para que trabajen con su Gobierno y contribuyan con inversión al desarrollo de su país, "una gran plataforma comercial" en América Latina. "España", dijo Bachelet, "tiene en Chile muchos representantes en el mundo empresarial, empresarios que valoramos y en quienes reconocemos la gran labor desarrollada".

Políticas sociales

La dirigente chilena aludió a los avances experimentados por Chile en los últimos años, a la consolidación de la democracia y a su crecimiento económico anual, que considera muy superior al de los años ochenta, y que se ha visto acompañado de "políticas sociales rigurosas" que han permitido reducir el índice de pobreza de un 40% a un 18% en sólo 16 años.

"Chile es un país que avanza, aunque tenemos claro que necesitamos avanzar más si queremos que los beneficios de este desarrollo lleguen a todas y a todos los chilenos", señaló. "Queremos alcanzar el nivel de países como España y Portugal. Queremos que Chile sea un país más acogedor, capaz de reducir los riesgos y la inseguridad económica que afecta a amplios sectores de la población".

No obstante, la presidenta reconoció que "no hay recetas mágicas ni atajos", por lo que recurrirá a políticas económicas y fiscales prudentes y disciplinadas para dar el salto al desarrollo con el impulso de la inversión pública y privada.

Bachelet anunció también la creación de un Consejo de Innovación y el logro de acuerdos comerciales con la UE, Estados Unidos, Mercosur y China, y actualmente se está en negociaciones con Japón.