La mujer que roció en Jaén con ácido a dos niños admite que fue por celos

La mujer acusada de rociar con ácido a dos niños de ocho y tres años de edad en Martos (Jaén) admitió ayer, durante el juicio, que actuó llevada por los celos que sentía al "sospechar una infidelidad" de su marido con la madre de los dos menores, una súbdita ecuatoriana que regentaba un bar. No obstante, la acusada se mostró "profundamente arrepentida" de los hechos, que tuvieron lugar el 6 de mayo de 2003, y declaró que su intención no era la de hacer daño a los menores, sino a la cuidadora que los acompañaba, a quien presuntamente confundió con la abuela de los chavales. El resultado de la acción fue que dejó prácticamente ciega a la niña mayor y con lesiones importantes a su hermano y a la cuidadora.

Ésta afirmó que la acusada arrojó hasta tres botes con salfumán a los niños y a ella misma, e incluso le gritó que "la tenía que matar". El fiscal y la acusación particular piden para María Antonia B.T. penas comprendidas entre los 14 y los 17 años de cárcel, así como el pago de indemnizaciones entre los 312.000 y los 680.000 euros.