Las diferencias de patronal y sindicatos enquistan el convenio del campo en Jaén

La negociación del convenio del campo de la provincia de Jaén se encuentra enquistada después de tres infructuosas reuniones que han puesto de manifiesto el distanciamiento entre la patronal agraria y los sindicatos. Este convenio, que afectará a los 100.000 trabajadores que participarán en la campaña de recolección de la aceituna, sirve de referencia cada año para otros acuerdos similares en el campo andaluz.

Los sindicatos UGT y CC OO han calificado de "déspota, rancia e inmovilista" la actitud de los representantes empresariales durante las reuniones mantenidas en los últimos días para la negociación del convenio. Antonio Marcos, secretario de la Federación Agroalimentaria de UGT en Jaén, ha criticado que después de tres encuentros "los empresarios no hayan puesto ni una sola propuesta seria sobre la mesa". Los sindicatos plantean una subida salarial del 7%, además del reconocimiento de las nuevas categorías laborales que se han generado como consecuencia de la progresiva mecanización en el campo. Sin embargo, la patronal no ha presentado ninguna contrapropuesta, pero sí ha dejado claro que no va a moverse del 3% de subida salarial. El argumento de los empresarios es que el campo jiennense y el andaluz han afrontado un año de crisis por las pérdidas derivadas por la sequía y las heladas y, por tanto, no es el mejor escenario para plantear subidas salariales.

Los sindicatos insisten en la actitud "prepotente" de algunas organizaciones agrarias que sólo aceptan mejoras para los trabajadores fijos, que en un sector como el agrario apenas representa el 1% del total de jornaleros. Antonio Marcos, de UGT, lamenta que la patronal "no ha variado en los últimos tres convenios su táctica de prolongar las negociaciones para provocar el desgaste de los sindicatos", algo que, recuerda, "sólo va en detrimento de una de las partes más importantes del tejido laboral de la provincia". Para el sindicato UGT, la demora y el silencio de la patronal agraria está provocando que los jornaleros que ya han empezado la recogida de la aceituna en algunas comarcas no dispongan aún de un acuerdo sobre las condiciones salariales y laborales.

El último convenio del campo (2003) estableció una subida salarial del 4%, equivalente al incremento del IPC más un punto y medio para garantizar el poder adquisitivo de los trabajadores. Así, el salario diario en la campaña olivarera está entre 36,5 y 38,70 euros, según las distintas categorías.