La ONU lanza el proyecto de una alianza de civilizaciones para combatir al extremismo

Naciones Unidas, a través de su secretario general, Kofi Annan, asumió ayer la iniciativa española de una alianza de civilizaciones e hizo un llamamiento a la comunidad internacional para que se sume al proyecto. Annan creará un grupo de expertos que deberá presentar propuestas para poner fin al deterioro en las relaciones entre pueblos y naciones pertenecientes a distintas culturas, "sanar" las divisiones y combatir el extremismo. Se trata de la iniciativa más amplia que abandera España en el seno de la Asamblea General de la ONU desde su adhesión a la organización en diciembre de 1955.

El presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, envió el miércoles a Annan una carta firmada junto a su homólogo turco, Recep Tayyip Erdogan, en la que le invitaban como copatrocinadores a lanzar el proyecto en el seno de la ONU. En la misiva, ambos líderes resaltaban que la alianza de civilizaciones permitirá crear "un clima de tolerancia, entendimiento, comprensión y diálogo en un contexto de democracia y de respeto de los derechos humanos" entre los distintos pueblos y naciones del planeta.

Annan se sumó ayer a la iniciativa. En una declaración escrita dijo que el proyecto tiene como objetivo construir un "puente" que permita superar la ruptura actual entre civilizaciones: "Es la respuesta a la necesidad de un esfuerzo de la comunidad internacional -desde las instituciones y la sociedad civil- para eliminar y superar prejuicios, malos entendidos, percepciones erróneas y divisiones, que podrían ser una amenaza potencial para la paz mundial".

Esta alianza, dijo Annan, permitirá corregir "amenazas emergentes que emanan como consecuencia de percepciones hostiles que fomentan la violencia". La cooperación "sanará" estas divisiones. La ONU señala que los eventos de los últimos años ponen en evidencia la existencia de una brecha cada vez mayor entre las sociedades islámicas y occidentales. "Es un clima que está siendo explotado y exacerbado por los extremistas en estas sociedades", señaló Annan en su comunicado.

La alianza de civilizaciones se entiende como una coalición contra estas fuerzas y como un "movimiento" que permitiría avanzar en el "respeto mutuo de las creencias religiosas y de las tradiciones". El portavoz de la ONU dejó claro que el lanzamiento de esta iniciativa no está vinculado con los atentados del 7-J en Londres, aunque señala que este tipo de proyectos son bienvenidos para acabar con las causas que están detrás del terrorismo. La ONU espera que se sumen el mayor número de países y organizaciones. La iniciativa cuenta ya con el apoyo de una quincena de Estados.

En paralelo, el secretario general tiene previsto designar a los miembros de un grupo de alto nivel que deberá elaborar su propio informe con recomendaciones o sugerencias para forjar esta alianza entre pueblos y naciones. La idea es que presenten un plan de acción para finales de 2006. El panel celebrará cuatro reuniones, la primera de ellas en Madrid en otoño.

España y Turquía seguirán actuando como copatrocinadores y facilitarán apoyo a la ONU para llevar adelante sus trabajos, financiando parte de los gastos corrientes. Annan concluyó reiterando que este movimiento reafirma la creciente interdependencia en todas las áreas de la humanidad, "desde el medioambiente a la salud, desde el desarrollo económico y social a la paz y la seguridad". Zapatero expresó anoche su satisfacción. Fuentes de La Moncloa calificaron de "éxito diplomático" el paso de Kofi Annan y comentaron que la lucha contra el terrorismo debe incluir "una visión estratégica para desecar los pantanos donde florece esta lacra".