Libertad para La Rambla

El Ayuntamiento de Barcelona está instalando estos días un sistema que impedirá a los vehículos no autorizados circular por La Rambla. El consistorio sólo permitirá el paso de vecinos, comerciantes y clientes de los establecimientos. El dispositivo, dotado de cámaras de seguridad para multar a los infractores, estará a prueba unos meses antes de entrar en funcionamiento.

Ya era hora de que se hiciera algo para solucionar los problemas de tráfico en la vía más turística de la ciudad. Todos los días, en especial en verano, La Rambla está abarrotada de gente que pasea tranquilamente o que hace turismo tranquilamente acompañada por el rugir de los motores y cláxones y por los peligros que comporta la interrelación entre vehículos y peatones.

Con la instalación de este dispositivo, La Rambla será de uso exclusivo para quienes que realmente la necesitan: es decir, vecinos y establecimientos. La Rambla, por su carácter turístico y por su anchura, no puede ser utilizada como una arteria vial. Los conductores que quieran desplazarse a la parte más céntrica de la ciudad o al litoral lo pueden hacer por la Via Laietana o por el Paral·lel, dos vías que sí están pensadas para un volumen de tráfico grande.

Esta medida va a hacer de La Rambla un sitio mucho más bonito de lo que es en la actualidad. Poder pasear, comprar o visitar sus edificios más emblemáticos sin el ajetreo del tráfico será una mejora que toda la ciudad notará.