El Vaticano abre las puertas para que fieles de todo el mundo honren al Papa

El Vaticano abrió ayer sus puertas para que cientos de miles de personas desfilen y rindan su último homenaje al papa Juan Pablo II, fallecido en la noche del sábado. Después de trasladar el cadáver de la sala Clementina a la basílica de San Pedro, y tras oficiarse una misa, decenas de miles de personas comenzaron en la tarde de ayer a desfilar ante los restos del pontífice. La capilla ardiente sólo quedará cerrada entre las dos y las cinco de la madrugada -para permitir las tareas de limpieza y mantenimiento- hasta que se celebren las exequias, el próximo viernes.

El Papa será enterrado en la cripta situada bajo la basílica, con toda probabilidad en el lugar donde reposó hasta 2001 el papa Juan XXIII, cuando su beatificación impuso el traslado de sus restos al interior del templo. El funeral será la ocasión para que más de 200 jefes de Estado o de Gobierno y representantes de todo el mundo acudan a Roma a rendir su último homenaje al pontífice.

Juan Pablo II será enterrado el viernes en la cripta de papas de San Pedro

Los Reyes presidirán la delegación española en Roma junto a Zapatero y Rajoy

El cardenal Ratzinger, como decano del colegio cardenalicio, oficiará el funeral

El rey Juan Carlos I y la reina Sofía encabezarán la delegación española, que también estará integrada por el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, el líder de la oposición, Mariano Rajoy, y los ministros de Exteriores y de Justicia.

El cardenal Joseph Ratzinger, en su calidad de decano del colegio cardenalicio, será el encargado de oficiar el solemne funeral del viernes.