A la alcaldesa de Colmenar de Oreja

María del Pilar Algovia Aparicio: le escribo en contestación a la carta que dirige a los vecinos alertándoles para que no escuchen a aquellas personas que libremente ejercen su derecho a la libertad de expresión y que democráticamente manifiestan su oposición a las decisiones que está tomando su Ayuntamiento. Personas que residen en la zona que usted dirige y a las que usted tiene la obligación de representar. Personas que tienen tanto derecho a decir lo que piensan como a ser respetadas por las personas que las gobiernan, y a las que usted tacha de burdos mentirosos y tendenciosos.

La carta, señora alcaldesa, sí que es tendenciosa. La carta busca, lógicamente, convencer a la gente de lo que usted piensa, pero su cargo no consiste en convencer a la gente de lo que usted piensa que es mejor para ellos, sino de desarrollar los proyectos que ellos aprueben. Usted les sirve a ellos, y no al revés.

Ya sabemos que no es una central nuclear. No acuda a vocabulario alarmista, no es necesario. Si realmente los organismos que nombra (OMS, ONU, UE) aprueban las centrales térmicas, ofrezca esa documentación a los vecinos tal y como la plataforma ofrece la información contraria. Basar toda la carta en la confianza que los vecinos deben tenerle es un argumento paupérrimo. Yo no la conozco, no tengo por qué confiar en usted, por lo que a mí su carta no me aporta nada.

Si para usted aceptar la central es decir "no al atraso, no al miedo, no a la miseria...", implica que Colmenar es un pueblo marcado por el atraso, el miedo y la miseria. Dígame qué otros medios está poniendo para sacar a Colmenar del atraso, el miedo y la miseria. ¿Cree que un pueblo marcado por esos rasgos necesita, por ejemplo, una pista de patinaje sobre hielo gratuita? ¿No hay nada más prioritario que saque al pueblo de la miseria y el atraso? ¿O quizá es que no hay tal miseria y atraso?

Convocar la ayuda del Santísimo Cristo del Humilladero para su proyecto es demagógico e inaceptable. Buscar la mejora del pueblo no para que los vecinos vivan mejor, sino para convertirlo en la envidia de España, es erróneo y triste. Buscar mejoras que el resto de los municipios "ni sueñan" es una frase absurda y un objetivo que ya le atribuíamos.

Recuerde que representa a todos los vecinos, no sólo a los que a usted le apetece, y que la central térmica afectará a muchas más personas, seres vivos y lugares que los que comprende él ámbito que usted dirige. Ejerza la responsabilidad y la capacidad de juzgar que se le supone, quizá erróneamente, a toda persona que ocupa un cargo como el suyo.