Los patrulleros hacen huelga de 'bolis caídos'

La Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) ha iniciado una huelga denominada de bolis caídos, en la que se insta a los agentes de Tráfico a que no pongan multas como forma de presión al Gobierno para que mejore sus condiciones laborales. Es una huelga encubierta, dado que el instituto armado no tiene este derecho. El director general de Tráfico, Pere Navarro, admitió la existencia de esta movilización, pero puso en duda que pueda afectar a las infracciones graves.

La iniciativa comenzó "espontáneamente" con mensajes de móvil entre los agentes, según fuentes de la AUGC, "porque están hartos de tantas promesas incumplidas". La asociación ha enviado una circular a sus 23.200 asociados, dentro de una campaña de movilizaciones en pro de la desmilitarización del cuerpo, con el fin de incrementar su labor pedagógica por encima de la sancionadora. "Pararán a los infractores y les explicarán lo que han hecho mal. La multa será el último recurso aplicable, sólo en casos graves", explicaron.

La AUGC pide un aumento de sueldo y del número de agentes. "Llevan meses anunciando lo del sueldo y nada de nada. Además, no hay 8.000 efectivos, como dicen, sino unos 4.500", asegura.

El director de Tráfico reconoció que necesitan más efectivos y recordó que se ampliará la plantilla con 3.000 más. La AUGC solicita también formación continúa para los agentes, una mejor planificación de los turnos y una renovación de los medios materiales.