Las grúas vascas retoman hoy la huelga que causó el caos en agosto

La huelga de grúas, que el pasado verano causó uno de los mayores conflictos sociales de los últimos años, regresa hoy a las carreteras vascas. Los empresarios de la comunidad autónoma se han sumado al paro indefinido convocado desde esta madrugada en toda España, que amenaza con volver a llenar de vehículos accidentados los arcenes. Los patronos de Euskadi, donde trabajan unos 350 remolques de asistencia en carretera, renunciaron al final a iniciar la huelga con 24 horas de antelación como habían previsto inicialmente.

"La gente se siente engañada y burlada", aseguró ayer el portavoz de las compañías, Filemón Galarza. Los empresarios de grúas desconvocaron el anterior paro a finales de agosto, pocos días antes de la operación retorno, con el compromiso de las aseguradoras de elaborar un estudio de costes y aplicarlo. Su queja es que les pagan entre 21 y 23 euros por un servicio urbano, cuando un informe elaborado por la Universidad de Alcalá y una consultora estima que el coste ronda los 50 euros.

Galarza calificó de "maniobras dilatorias" el planteamiento de las aseguradoras de esperar a la redacción definitiva del informe y el dictamen del Servicio de Defensa de la Competencia. "Los plazos se han acabado sin que hayan hecho ningún movimiento en políticas tarifarias", recalcó.

La Subdelegación del Gobierno en Vizcaya anunció ayer que realizará un "especial seguimiento" de la huelga que, en agosto dejó más de 400 vehículos tirados en las carreteras vascas. Recordó que el anterior paro supuso "un caos" y un "riesgo" en los viales, además de la indefensión de los conductores que fueron objeto de robos.

La asociación de consumidores EKA reclamó un esfuerzo a a las dos partes para alcanzar un acuerdo y solicitó información clara sobre la situación en que quedarán los conductores, como las posibilidades de que puedan remolcar los vehículos "de forma particular".