El Pentágono retiene a 325 extranjeros al margen de los acuerdos de Ginebra

Estados Unidos ha aumentado significativamente el número de prisioneros extranjeros que no están protegidos por la Convención de Ginebra como consecuencia de las últimas operaciones en Irak, en las que se han detenido a centenares de insurgentes. El Ejército cifra en 325 el número de combatientes extranjeros retenidos en Irak, a quienes no se aplica la Convención, según informó un funcionario del Pentágono.

Antes del inicio de la operación de Faluya, el pasado 7 de noviembre, eran 185 los extranjeros retenidos en estas condiciones. Portavoces del Gobierno estadounidense aseguraron que muchos de ellos son sospechosos de tener vínculos con Al Qaeda o con redes terroristas que apoyan a la insurgencia en Irak. Algunos de los detenidos podrían ser transferidos a cumplir su detención en otro país, según las fuentes consultadas.

"Obsoleta"

El nuevo fiscal general de EE UU, Alberto Gonzales, que en 2002 consideró "obsoleta" la Convención de Ginebra, se ha comprometido esta semana ante el Senado a luchar contra la tortura, pero insistió en que algunos de los prisioneros capturados en Irak quedan fuera de la Convención. "Hay miembros de Al Qaeda acudiendo a Irak y tratando de matar a estadounidenses", afirmó Gonzales, quien añadió: "Había miedo a que se creara un santuario para los terroristas si éstos supieran que pueden ir a Irak a intentar matar estadounidenses y recibir las protecciones de los prisioneros de guerra", añadió.

Gonzales confirmó que el Departamento de Justicia tiene documentos sobre si considerar a los combatientes extranjeros en Irak como parte de la insurgencia o no y sobre si aplicarles la Convención de Ginebra. "Creo que la conclusión fue que no debería aplicárseles la Convención de Ginebra", afirmó.

En estas condiciones están desde hace tres años los 550 prisioneros que siguen en el campo estadounidense en Guantánamo. Un portavoz del Gobierno ha reconocido esta semana que la gran mayoría de ellos ya no tiene ningún valor para los investigadores, pero que pese a ello seguirán presos.