Dimiten el edil de Seguridad y el jefe de policía de Oviedo, denunciado por malversación

IU denuncia en un juzgado una galería de tiro irregular y la compra de más de 100.000 balas

El alcalde de Oviedo, Gabino de Lorenzo, del PP, ha aceptado la dimisión del concejal responsable de Seguridad Ciudadana, Javier Sopeña, que también es senador por el Partido Popular, y del jefe de la Policía Municipal, Agustín de Luis Criado, cuatro días después de que Izquierda Unida presentara una denuncia en el juzgado contra De Luis por supuesta malversación de fondos públicos, prevaricación y otras seis posibles irregularidades administrativas, y solicitase a su vez al juez que tome declaración a Sopeña por los mismos hechos.

Sopeña continuará como edil sin cartera y De Luis será nombrado asesor personal del alcalde en materia de seguridad, según confirmó ayer un portavoz del Consistorio. El PP de Asturias no opinó sobre estos hechos y se remitió a los responsables del partido en Oviedo, cuyo presidente es el alcalde De Lorenzo, a su vez vicepresidente regional del PP.

En su denuncia judicial IU acusa a Agustín de Luis de supuestos delitos e irregularidades por un importe de "cientos de millones de pesetas no aclarados en los últimos años", según aseguró ayer el portavoz de la coalición, Roberto Sánchez Ramos.

Entre los hechos puestos en conocimiento del titular del Juzgado de Instrucción número 2 de Oviedo figura la construcción de una galería de tiro para la Policía Local, cuyo coste ha ascendido a120.000 euros y que, según la coalición de izquierdas, no cuenta con la autorización de la Intervención Central de Armas y Explosivos de la Guardia Civil. Además el contrato se adjudicó obviando los preceptivos trámites administrativos y se desconoce incluso el nombre de la empresa a la que fue adjudicada, según IU.

La denuncia de la coalición también cita la compra "desorbitada" de 119.200 balas en los años 2003 y 2004 para los agentes locales, cuando el consumo de la policía municipal es de unas 7.000 anuales. El suministro de munición no ha llegado a dependencias policiales, según la misma denuncia. Sopeña aseguró que ese pedido está almacenado en la tienda de armería a la que fue adquirido. La armería es un negocio particular propiedad de un empresario cercano al PP y amigo del ex vicepresidente primero del Gobierno Francisco Álvarez-Cascos.

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