La película de animación 'Supertramps' llega a las pantallas para acercar a los niños al problema de la marginación social

El largometraje de animación para niños Supertramps, dirigido por José Mari Goenaga e Iñigo Berasategui, se estrenó el pasado 6 de noviembre en la XV Semana de Cine Fantástico y de Terror de San Sebastián, se ha pasado en el recién clausurado Festival de Gijón y el viernes llega a las salas comerciales para contar la historia de un grupo de animales urbanos, representantes de sectores desarraigados de la ciudad, que ven alterada su vida por la llegada de una gata mimada. La historia, producida conjuntamente por Irusoin -ganadora de un Goya en 2001 por La Isla del Cangrejo- y Dibulitoon Studio, es sólo la excusa. ¿El propósito final? "Enviar un mensaje a los niños sobre temas de actualidad a través del entretenimiento y del buen humor", según sus responsables. En este caso, sobre la marginación o la situación que viven los inmigrantes.
Sin embargo, Supertramps, con música del compositor francés Pascal Gaigne, huye de un tono excesivamente moralizante y prima la aventura, como se han encargado de repetir una y otra vez sus directores. La técnica, apuntan, es también "innovadora" en el panorama español. El equipo de profesionales de Dibulitoon Studio ha mezclado en esta ocasión la animación en 3-D, para el modelado de personajes, y la imagen real. Para la realización de los escenarios se construyeron maquetas a escala de escenarios de San Sebastián, Pasajes o Irún, que también se han utilizado como base.
Supertramps, que se estrenará en castellano el 22 de diciembre en 25 salas de fuera del País Vasco, es la principal baza de la animación vasca para estas Navidades. Teóricamente, el sector no puede soñar con competir con las producciones de Disney o Pixar, porque no tiene, ni de lejos, los mismos recursos -1,2 millones de euros de presupuesto- para fabricar efectos especiales y bombardear a los niños con campañas promocionales. Sin embargo, los tiene en el bolsillo. Un dato. Anje, la leyenda del Pirineo, que en Euskadi se tituló Olentzero, un cuento de Navidad, de Juanjo Elordi, desbancó de la taquilla en las fiestas de 2002 El planeta del tesoro, de Disney.
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