"Si no juego bien, me veo suplente"

"A mí no me pagan por vender camisetas", dijo ayer David Beckiham, poniendo en escena un novedoso gesto grave, como de hombre ofendido, herido, honrosamente en guardia frente a la amenaza de la humillación. El inglés habló por la mañana, horas después de caer derrotado frente al Barcelona en el Camp Nou por 3-0. "Me pagan por jugar al fútbol", explicó; "y si juego mal me veo en el banquillo, como cualquier futbolista".

Desde que Beckham fichó por el Madrid el equipo no ha ganado nada, aparte de un trofeo en Pekín. Sin embargo, el hombre es una estrella que atrae a empresarios del espectáculo. El viaje a Barcelona no fue un caso aparte: con el equipo, catando el ambiente, se trasladó Mike Jeffries, uno de los productores y guionistas de la película Goal, superproducción de Hollywood en la que Beckham tendrá una aparición destacada. Jeffries, que nunca había estado en un clásico, se debió llevar la impresión de que quizá no estaría mal contar con un tipo como Guti para filmar alguna secuencia de fútbol puro. Su gesto grave, al regresar a Madrid, hacía pensar en un probable cambio de guión.

Beckham hizo contra el Barça un partido irrelevante. Apagado y torpón, fue uno de los peores jugadores del Madrid en el Camp Nou. La figura del ex volante del Manchester se empequeñeció por contraste con la de Guti. Sus estadísticas comparadas dicen menos de lo que significaron sobre el terreno. Si las recuperaciones, los pases y la capacidad para asegurar la pelota constituyen la base del trabajo de un medio centro, entonces hay que decir que Beckham no puede seguir jugando en ese puesto. Guti recuperó ocho balones, cifra que lo coloca al nivel de Mauro Silva. Beckham recuperó dos. Beckham dio 18 pases buenos, un número absurdo tratándose de un jugador que ocupó la posición donde más contacto se tiene con la pelota. Guti dio 61 pases buenos. Los regates, una forma de medir la capacidad para defender la pelota, también dijeron mucho: Beckham, que no sabe ni proteger el balón con su cuerpo, no hizo ningún regate bueno. Guti hizo seis.

Beckahm suele echar mano del aspecto físico para responder a las críticas futbolísticas. Ayer no hizo una excepción. "Llevaba seis semanas sin jugar y no puedo estar en mi mejor momento de forma", dijo. "Llevo tres encuentros seguidos, pero para mejorar necesito tener más minutos, pues es la única manera de coger el ritmo. Los últimos encuentros que he jugado no ha sido lo mejores que he hecho con el Real Madrid, pero todo ha sido como consecuencia del tiempo que he estado lesionado [tuvo una fractura de costilla]. Tengo que seguir entrenándome fuerte para recuperar cuanto antes todas mis fuerzas".

Además, Beckham negó que el partido de ayer tuviera consecuencias históricas: "Siempre que un club grande pierde un partido se dice que hay una crisis. Esto no lo es. Tampoco estoy de acuerdo con que sea el fin de un ciclo".