Junto al PP hasta el final

El Partido Popular ha anunciado formalmente su voto favorable al referéndum del 20 de febrero y la realización de una campaña explicativa. Éste es el único dato que le importa al PSOE y, por tanto, todo el proceso hasta las urnas lo quiere hacer en común con los populares y, para empezar, las líneas de la campaña institucional. Ahora bien, en la dirección socialista planea la sospecha de que el PP, si puede, tratará de "ponerse de lado para que no se note mucho su presencia", dijeron miembros de la ejecutiva federal. ¿Y por qué? La impresión de estos interlocutores, con algún dato de la actitud del primer partido de la oposición, es que si el referéndum resulta correcto en cuanto a participación y, por tanto, al sí, el líder socialista puede tener la tentación de apuntarse el tanto. Y si sale mal, el PP no quiere resultar copartícipe. Estos prejuicios, resquemores o malos pensamientos aseguran en el PSOE que no son "fantasmas" y ponen como último la negociación de la representante del PP, Soraya Sáenz de Santamaría, mano derecha de Mariano Rajoy, con el secretario general del Grupo Socialista, Diego López Garrido. Se asegura que Sáenz de Santamaría propuso someter al escrutinio del Tribunal Constitucional la Carta europea al completo para comprobar si hay contradicción con la Constitución española. "Nuestro representante señaló que eso llevaría tres años, por lo que preguntó si el PP quería o no el referéndum", comentan en la ejecutiva. Hubo acuerdo en que sólo se estudien cuatro puntos.

Pero oficialmente se actúa como si nada se temiera. El dirigente socialista José Blanco proclamó ayer: "PP y PSOE van juntos en el apoyo al referéndum en aras del interés general de España"