"No marcamos ni en dos días"

"Podríamos haber seguido jugando durante dos días más, incluso durante una semana entera, pero ni así hubieramos marcado un gol", dijo Frank Rijkaard al buscar la razón por la que ayer el Barça cayó eliminado en Santa Coloma de la Copa del Rey.

Se reconoció "decepcionado, porque no hemos cumplido" pero defendió la conducta del equipo: "Lo ha intentado todo y no podemos lamentar la manera en la que han afrontado el partido. Lo han intentado todo". El holandés defendió a sus jugadores al considerar que la actitud fue correcta: "No hay nada que criticarles, porque sólo les faltó acierto en el último momento, pero lo intentaron de todas las maneras". Y concluyó: "Trabajar hemos trabajado como exigía el partido, ése no ha sido el problema".

Tranquilo, como siempre, reconoció que la Gramenet "ha jugado un gran partido y se han merecido la victoria, porque buscaron su suerte y pelearon por conseguir el gol. Solo podemos felicitarles".

Carles Puyol aseguró que la derrota "supone un golpe duro". El capitán no es la primera vez que sufre un palo semejante: Fue eliminado en Novelda y en Figueres, antes. "Perder siempre duele, pero en la Copa aun más". Tras disculparse ante los aficionados por no haber sido capaces de superar a un equipo de inferior categoría, prefirió mirar adelante: "Hay que seguir. Sabíamos que podía pasar y cuando la pelota no quiere entrar, no entra". Los jugadores de la Gramenet celebraron la victoria "lograda a la italiana" según su entrenador, Juliá García, que dificilmente olvidarán: "Es lo más grande que me ha pasado nunca", dijo Castilla, el portero.