Vertedero de Baena

Este lector planteaba hace unos días algunas preguntas críticas sobre el proyecto de vertedero de residuos industriales de Baena. La respuesta del teniente de alcalde de esa localidad me obliga a recordarle, por si lo ha olvidado, que la empresa Tecmed, filial de ACS, ha presentado a los medios de comunicación su proyecto de vertedero de residuos peligrosos y no peligrosos de Baena, con capacidad para depositar cada año 285.000 toneladas. Luego, en medio de las movilizaciones ciudadanas, el alcalde de Baena ha anunciado que el vertedero sería sólo de residuos no peligrosos, lo que incluye, según la legislación vigente, a los peligrosos no reactivos.

Un macrovertedero con esta capacidad no es para depositar los lodos de depuradoras y escombros que se puedan generar en la campiña cordobesa. La empresa sabe bien que las normas europeas, a las que deben adaptarse las autonómicas, le amparan para traer, ahora o en el futuro, residuos industriales de donde les sea rentable (España o Portugal). Es su negocio y han adquirido nada menos que cincuenta hectáreas de terreno para ubicar su instalación.

Coincido con el teniente de alcalde de Baena en que las referencias críticas a la financiación de ayuntamientos con el canon obtenido por recibir basuras industriales, a los daños medioambientales que provocaría el vertedero o a sus efectos negativos en el futuro del aceite de Baena son "perogrulladas", esto es, "afirmaciones tan evidentes y sabidas que no vale la pena decirlas". Resulta triste que los ciudadanos nos veamos obligados a decir y repetir ideas evidentes y sabidas ante la ceguera del alcalde de Baena y su grupo de concejales. Espero que la ceguera no haya afectado también a la Junta de Andalucía pues la cuestión central continúa siendo: ¿Quién planifica la gestión de residuos en Andalucía?