Font de Mora deja en manos de los tribunales la huelga escolar de Llucena

El consejero de Cultura, Alejandro Font de Mora, recibió ayer, por primera vez, a los representantes de la Asociación de Madres y Padres de Alumnos de Llucena y al alcalde de la localidad, Vicente Nebot, cuando los niños del municipio llevan ya casi 20 días sin clase. Font de Mora trasladó su decisión "definitiva" de no escuchar sus reivindicaciones a no ser que así lo determine el Tribunal Superior de Justicia (TSJ) ante el que el Ayuntamiento ha presentado un recurso. De esta manera, deja en manos de lo que decida el juez la escolarización de la veintena de niños de entre 12 y 14 años que, de momento, no están matriculados en ningún centro. Además del recurso, el Ayuntamiento ha solicitado que, como medida cautelar hasta que se dicte la sentencia, el tribunal deje sin efecto la orden de la consejería en la que se establece el traslado a L'Alcora.

La protesta de los padres trata de evitar que los alumnos se trasladen a L'Alcora para cursar primero y segundo de Educación Secundaria Obligatoria (ESO). Como respaldo a la situación de los estudiantes del primer ciclo de ESO ninguno del más de un centenar de niños de Llucena acude al colegio. Los padres reclaman el mismo trato que se ha otorgado a otras poblaciones como Atzeneta del Maestrat, el pasado curso. Según el alcalde del municipio, el socialista Vicente Nebot, Font de Mora se escudó ayer en el hecho de que aquella fue una decisión que tomó su antecesor en el cargo, Esteban González Pons, y que la atención a su reivindicación "podría dar pie a una extensión de conflictos similares, con los consiguientes perjuicios para el conjunto del sistema educativo". Al igual que la consejería, los padres, tras la reunión, manifestaron su intención de permanecer firmes en su postura y de mantenerse unidos en su medida de fuerza.