Los derechos de los niños sordos

Me llamo Clara Chuliá, tengo 12 años y vivo en Valencia. Soy sorda. Este curso he empezado 1º de ESO en el instituto Malilla. Quisiera tener un intérprete de Lengua de Signos para poder entender lo que dicen los profesores en clase.

Siempre me dicen que tengo que esforzarme mucho y trabajar más que los otros, pero yo estoy un poco harta, porque siempre me esfuerzo, pero es muy difícil para mí. Si quieren comprobarlo, enciendan la tele, le quitan la voz y se sientan delante siete horas al día, a ver si entienden algo mirando la boca de las personas que salen. Pues eso es lo que hago yo en clase todos los días. Y no me parece justo.

Yo quisiera ser veterinaria, porque me gustan mucho los animales, pero no sé si podré, porque todo es muy difícil. Tengo suerte porque mis padres son profesores y me ayudan mucho, y también tengo buenos amigos en clase que me ayudan, pero... Hemos pedido a la Conselleria de Educación un intérprete de Lengua de Signos, pero no nos han contestado. Acaba de ser el día internacional de los sordos y he visto en Internet (me gusta mucho navegar, porque así sí que entiendo las cosas) que el Gobierno dice que harán una ley de Lengua de Signos pronto. ¡Ojalá!

Yo sé que el nuevo presidente del Gobierno se llama señor Zapatero y le pido que se acuerde de los sordos, y sobre todo de los niños sordos.