Detenidos en Francia dos supuestos etarras del 'aparato logístico'

Agentes de la Gendarmería francesa detuvieron ayer en Saintes, al norte de Burdeos, a los supuestos etarras Angela Aramendi Landa y Julen Eizagirre Uranga, miembros del aparato logístico de la banda terrorista, según informaron fuentes policiales. La pareja, que iba armada con sendas pistolas automáticas, fue arrestada tras saltarse un control de carretera. Aramendi tiene causas pendientes en la Audiencia Nacional.

La pareja se negó a declarar y se limitó a reivindicar su pertenencia a la banda terrorista ETA cuando fue detenida, según informaron fuentes próximas al caso. La policía francesa les confiscó dos pistolas automáticas, documentos de identidad falsos y documentos con membrete de ETA, añadieron las mismas fuentes.

En el momento del arresto, la pareja, que viajaba en un Peugeot 406 con la matrícula doblada, estaba acompañada por su hijo. La sección antiterrorista de la Fiscalía de París fue informada de inmediato.

El vehículo de la pareja forzó una barrera policial, tras lo cual se produjo una breve persecución. Después de abandonar el coche, los supuestos etarras se refugiaron en un bosque, donde se vieron rápidamente rodeados ante la llegada de refuerzos de la Gendarmería, por lo que se rindieron a las fuerzas del orden.

Aramendi pertenecía a un grupo de apoyo al comando Gohierri Kosta, a cuyos miembros ayudó en varios atentados contra patrullas de la Guardia Civil. Aramendi huyó de España tras la desarticulación del comando Gohierri Kosta, desmantelado en 1991, y tiene reclamaciones de la Audiencia Nacional en sumarios en los que se le imputan delitos de terrorismo, atentados y colaboración y pertenencia a banda armada.

Los dos presuntos terroristas nacieron en Zestoa (Guipúzcoa); él en 1966 y ella en 1970. Según las fuentes consultadas, la pareja ha estado residiendo anteriormente en México, aunque en una fecha indeterminada viajó a Francia para incorporarse a la actividad terrorista.

Hace casi un mes, el 17 de junio, la policía francesa asestó un duro golpe al aparato encargado de los llamados grupos de reserva de ETA, formados por terroristas huidos que la banda prepara y mantiene en Francia a la espera de distribuirlos en comandos. Los agentes detuvieron a ocho presuntos terroristas, entre ellos Iñaki López de Bergara Astola, Yves, acusado por la policía de ser el máximo responsable de la estructura de los taldes de reserva, captación y formación de activistas de la banda.

La policía española consideró entonces que con esa operación se había dificultado la campaña de verano que ETA estaba preparando en Francia.