Sáez: "Contra Grecia, cambiaré las armas"

La selección salió del estadio de Faro con el espíritu autocrítico y pensando en el próximo rival, Grecia, al que se enfrentará el próximo miércoles en Oporto. "Nosotros ya sabemos lo que son los griegos", dijo Torres con una media sonrisa; "casi nos dejan fuera de la Eurocopa. Alcanzamos a ver sus primeros minutos contra Portugal y defienden muy bien. Te presionan, no te dejan salir. Si te meten un gol de entrada, es imposible levantarlo. Y si les ganamos, estamos en la segunda fase".

"Nos ha faltado estar más juntos", dijo Baraja, en línea reflexiva; "porque cuando perdíamos el balón teníamos que correr 60 metros y no nos recuperábamos. Pero durante todo el primer tiempo el equipo ha salido a buscar el gol. Lo que ocurre es que con este calor no se podía mantener ese ritmo y si llegabas y no marcabas las cosas se complicaban".

Albelda opinó igual que Baraja y agregó que las rotaciones no vendrían mal: "El míster es el que tiene que decidir. Hay gente que venía tocada físicamente y no será fácil llegar bien a todos los partidos. Estamos tranquilos porque la plantilla de la selección es muy amplia".

Las variantes de Baraja por Alonso, de Morientes por Torres y de Luque por Vicente podrían dar aire a unos jugadores que terminaron agotados. Sáez lo admitió y también insinuó cambios en la alineación: "Ha sido un partido duro. Rusia se ha empleado a fondo. Nosotros hemos llevado el mando en la primera parte, luego se ha nivelado, y en la segunda, con los cambios marcamos un gol y lo controlamos más. Contra Grecia emplearemos armas nuevas".

"El partido inicial", dijo Sáez; "siempre es el más difícil. La verdad es que esperaba marcar en la primera parte. Rusia salió desconfiada pero con el paso del tiempo se vino arriba. Comenzó a combinar en corto con paredes al área y Alenichev tuvo una que sacó Iker. Esa acción fue lo más bonito del equipo ruso". La parada de Casillas, típica del portero, en un mano a mano con el volante del Oporto metido en el área, salvó a España de pasar un mal rato y levantó a la grada.