Iglesia y Gobierno firman un plan nacional de abadías y monasterios

El Ministerio de Educación, Cultura y Deporte, y la Conferencia Episcopal Española acordaron ayer poner en marcha el Plan Nacional de Abadías, Monasterios y Conventos. El documento, firmado por la ministra en funciones, Pilar del Castillo, y el presidente de la Conferencia Episcopal, Antonio María Rouco, es un acuerdo marco, según la información facilitada por las dos instituciones, que permitirá la conservación y restauración de este patrimonio histórico-artístico, tanto en lo referente a su arquitectura como a los bienes que albergan.

Se pretende también con este acuerdo abrir el patrimonio a su visita al público, respetando la vida monástica de las comunidades de esos conjuntos.

El acuerdo, similar al que se firmó hace unos años para la puesta en marcha del Plan Nacional de Catedrales, se enmarca en lo dispuesto en los artículos 16 y 46 de la Constitución Española y en el XV Acuerdo Internacional entre el Estado Español y la Santa Sede sobre Asuntos Culturales de 3 de enero de 1979.

Este Plan Nacional de Abadías, Monasterios y Conventos se une a los planes de restauración y conservación que está desarrollando en la actualidad el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte en colaboración con otros ministerios, comunidades autónomas y otras instituciones.

Mediante el acuerdo suscrito ayer, "el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte reconoce la importancia de estos conjuntos arquitectónicos como bienes de especial relevancia integrantes del patrimonio histórico español que deben ser conservados, mantenidos y custodiados". La Iglesia "reitera su voluntad de que continúen al servicio del pueblo español, así como de cuidarlos y utilizarlos de acuerdo con su valor histórico y artístico, respetando siempre el estilo de vida propio de sus comunidades".

Planes directores

Las abadías, monasterios y conventos en los que se actuará deberán tener la categoría de bien de interés cultural y las actuaciones deberán ajustarse a lo establecido previamente por los planes directores o de actuación que se elaboren según las características de cada inmueble.

Estos planes serán elaborados por equipos pluridisciplinares, deberán ser aprobados por los representantes del ministerio, comunidades e Iglesia a través de la Comisión Técnica de Seguimiento. La financiación de los planes y de las obras de restauración se acordará conforme a los porcentajes que en cada caso se determinen.

Además, se elaborará también un catálogo de los bienes muebles que sean o hayan sido de uso abacial, monástico o conventual, y que sean susceptibles de ser conservados y documentados. Asimismo, según el acuerdo, se elaborará un inventario del patrimonio inmaterial. En todo este proceso, se prestará especial atención al patrimonio documental y bibliográfico que se conserva en estos lugares.