Freno al maratón de partidos

Ronaldinho lo quiere jugar absolutamente todo. Es lo que venía haciendo hasta hace algunas semanas, no importaba de qué competición se tratara: Liga, Copa de la UEFA, Copa del Rey o Copa Cataluña. Su rendimiento inicial fue de lo más espectacular, máxime teniendo en cuenta su juventud -23 años- y que debía pasar un periodo de adaptación al equipo y al fútbol español. En los 15 primeros partidos que disputó anotó 8 goles. Pero el 9 de noviembre, durante los primeros minutos del partido ante el Betis, sufrió una lesión muscular. Poco acostumbrado a sufrir este tipo de contratiempos y a detectar su importancia, quiso continuar jugando. Pero no pudo. Se perdió cinco partidos. Desde entonces, ha disputado 11 partidos más en los que ha anotado 4 goles, 3 de ellos de penalti.

En los últimos encuentros Rijkaard empezó a dosificarlo a pesar de que ya sabía que no iba a poder alinearlo el pasado domingo ante el Albacete por estar sancionado. Lo había sustituido otras veces -ocho- pero no en las situaciones de partido en que lo hizo ante el Sevilla y ante el Zaragoza. Nada estaba decidido en ninguno de ambos partidos. El Barcelona ganó con apuros en Sevilla (0-1) y en La Romareda, después de que él fuera relevado, encajó el gol del empate y quedó eliminado de la Copa.

Durante enero, Ronaldinho acumuló 600 minutos de juego. Entre los jugadores de los equipos importantes, sólo Ayala y Sergi disputaron más minutos que él. Aún así, Ronaldinho se enojó cuando fue relevado por Overmars en el Sánchez Pizjuán y por Luis Enrique en La Romareda.

Ronaldinho no es el jugador que más minutos ha disputado en la Liga, ni siquiera en el Barça. Sus 1.442 minutos son superados hasta por cinco de sus compañeros y, por ejemplo, once jugadores del Madrid suman más minutos que él. Ahora, además de la Liga, le espera la Copa de la UEFA y un amistoso con Brasil el próximo 18 de febrero. Pero la última jornada de obligado descanso y la eliminación de la Copa ha frenado un tanto su maratón de partidos.