Un 'tió' gigante en Santa Llúcia

Los prolegómenos de la Navidad acostumbran a llegar a Barcelona cada año con la Fira de Santa Llúcia. Y un año más, los alrededores de la catedral de Barcelona se han convertido en el escenario de venta de belenes, figuras y árboles de Navidad.

Miles de ciudadanos se pasean por las angostas calles que rodean los casi 400 puestos de venta distribuidos por la zona. A un lado de la plaza, los niños hacen cola para divertirse. Saben que, a golpe de palo, el tió da caramelos y golosinas. En la imagen se aprecia un tió de tamaño gigante que cada año se instala en la feria.

Este año los puntos de venta se han puesto al día. Aparte de las tradicionales figuritas de Navidad, de las zambombas y del musgo, la feria ofrece también figuras del presente. Copito de Nieve es uno de los más vistos y en los puestos se pueden encontrar caganers con figuras de políticos, como Pasqual Maragall, Josep Lluís Carod Rovira y Artur Mas. En algunos casos también se pueden consultar los productos disponibles a través de las páginas de Internet.

Pero ayer no sólo la Fira de Santa Llúcia atrajo al público.Como ya ocurrió el lunes pasado, las tiendas de los principales ejes comerciales se llenaron de compradores y de familias que miran antes de elegir los regalos de Navidad y Reyes. Los comerciantes esperan que las ventas se vayan animando a medida que se acercan las fiestas y aumenten en torno al 6% durante éstas. Hoy es el segundo de los festivos en que abrirá el comercio este mes. La próxima apertura en día no laborable está prevista para el domingo día 21.