Científicos para el Medio Ambiente reivindica una ciencia comprometida

Científicos españoles de todas las disciplinas naturales y sociales han creado la asociación Cima (Científicos para el Medio Ambiente), una entidad independiente cuyos objetivos son dar una visión alternativa de los problemas científicos y ecológicos, difundir la información científica en la sociedad y garantizar una investigación independiente y orientada a los problemas sociales. La presentación de la entidad tuvo lugar ayer en el Colegio de Periodistas de Cataluña y contó con la intervención de Miquel Porta, doctor en Medicina y presidente de la organización, y Núria Ferrer, vicepresidenta y doctora en Ciencias Químicas. Los ponentes demostraron la interrelación entre ciencia y sociedad planteando un problema "del que nadie se puede escapar": los compuestos tóxicos de la sangre. Las 28 sustancias tóxicas que se detectaron en la sangre de la comisaria de Medio Ambiente de la Unión Europea, Margot Wallström, el pasado octubre demuestran que todos sufrimos esta intoxicación y éste es un ejemplo de los problema científicos y sociales sobre los que Cima pretende informar e investigar.

"Somos científicos comprometidos con la sociedad y por ello queremos recuperar el rigor de la investigación científica", apuntó Porta. "La gente tiene derecho a saber, y no puede ser que necesitemos muertos o catástrofes naturales para poder investigar", añadió.