Capitostes

Los que hace mucho tiempo que peinamos canas, no nos acostumbramos a viejas frases que pronunciaban los capitostes que detentaban poderes incontestados en épocas ominosas. Aún hoy, algunos jefecillos contestan con "¡no sabe usted con quién está hablando!", cuando alguien osa echarle en cara algún desaguisado que uno de ellos comete. Esta misma mañana, sobre las 9.30 horas, cuando paseaba por el parque de María Luisa, veo que un turismo gris, M-8355-ML, aparcaba al lado de la glorieta de los Hermanos Álvarez Quintero, a menos de 40 metros de la avenida de la Borbolla. Al conductor, de un habla fino, le dije que en el parque no se podía aparcar y me contestó que como era responsable del recinto lo hacía y que me retaba a que lo denunciara porque él se pasaba mi denuncia "por debajo del forro de los co...". Éste es el hecho, sobran otros comentarios. Esperamos que las autoridades pongan coto a estas conductas prepotentes y poco ejemplares que se producen con cierta frecuencia en nuestra ciudad.