Greenspan ve aún "riesgos" para la recuperación en Estados Unidos

La Reserva Federal (Fed), banco central estadounidense, no tiene intención de tocar los tipos de interés durante los próximos meses. Para su presidente, Alan Greenspan, todavía existen "riesgos" e "incertidumbres" en el frente económico que sugieren que la política monetaria deba tomárselo con calma frente a las decisiones de los políticos. Y como ya dijera hace una semana, la Fed opta por ser paciente y no dejarse llevar por el espectacular crecimiento registrado durante el tercer trimestre del año (7,2% del PIB) o por los datos de empleo, para ver las cosas con perspectiva.

Greenspan hizo esta reflexión en el Foro Internacional sobre Política Monetaria, en el que participó también el economista jefe del Banco Central Europeo (BCE), Otmar Issing. A la vez, ayer se conocía el dato de producción industrial, que creció en octubre un escaso 0,2%, por debajo de las expectativas. Y el de consumo, que cayó un 0,3% debido al bajón en las ventas de automóviles, también más de lo esperado, y a un estancamiento del gasto debido a que gran parte del dinero de bolsillo de los recortes fiscales se gastó en verano y a que los ciudadanos se reservan.

La lectura de los analistas sigue siendo positiva, aunque cauta, y explican que lo que preocupa realmente a la Fed son los resultados negativos en el sector manufacturero. Y mientras además exista el "mínimo riesgo de deflación", según afirman los economistas del banco UBS, la Reserva Federal se mantendrá quieta donde está. A esto se le suma que la tasa de desempleo sigue siendo alta (6%) y sin visos de grandes mejoras durante los próximos meses. Además está la incógnita de la evolución del dólar en el mercado de divisas.

La confianza, en máximos

"Hay obviamente preocupación sobre hasta cuándo va a aguantar este masivo impulso del crecimiento en EE UU", reconoció un economista de Insight Investments. Desde Merrill Lynch se señala que, de tocarse los tipos, será a partir de marzo y no por mucho. El problema, como advierten los analistas, es que cada vez que se revisan al alza los tipos de interés, la Bolsa sufre a la baja porque se orientan las inversiones hacia otro tipo de activos para catalizar el impacto del incremento en el precio del dinero.

El dato positivo de la jornada fue el índice de confianza de los consumidores, confeccionado por la Universidad de Michigan, que aumentó en noviembre 4,1 puntos, hasta los 93,5 puntos una cifra no esperada por los analistas que refleja el optimismo de los americanos en la marcha de la economía. El nivel alcanzado es la mejor cifra desde mayo de 2002. El índice de confianza de la Universidad de Michigan es muy esperado por los mercados financieros, dado que dos tercios de la economía de Estados Unidos procede del consumo interno.