La crisis de Marbella y la reforma de la Ley Electoral

Lo peor de todo en estos 100 días tiene nombre: Marbella. Los cuatro partidos coinciden en que la crisis institucional que ha vivido este ayuntamiento, después de que tránsfugas del PSOE y del PA en alianza con ex del GIL arrebataran la alcaldía a Julián Muñoz, es el hecho más grave de cuanto ha acontecido en estos 100 días.

Y todos coinciden también en la necesidad de reformar la Ley Electoral para evitar el endémico problema del transfuguismo. La propuesta más clara es la del socialista Salvador Pendón: Elección directa de los alcaldes con prima a su lista o que haya segunda vuelta si no hay mayoría absoluta.

Willy Meyer, de IU, también apunta a una reforma de la Ley Electoral, pero en otro sentido: el escaño o el acta de concejal tiene que ser del partido y no de la persona que lo representa. El dirigente de IU asegura que episodios como el de Marbella o la crisis de la Comunidad de Madrid demuestran que "hay un intento serio diseñado para que los ciudadanos pierdan la confianza en la democracia, para que vean que la democracia no es útil".

El popular José Luis Rodríguez también cree que es necesario alcanzar un consenso para reformar la Ley Electoral para acabar de una vez por todas con el transfuguismo, aunque no revela por dónde tiene que ir este cambio.

El andalucista Juan Carlos Benavides también opina que debe cambiarse la Ley Electoral que "permita tener al ciudadano relación directa con su alcalde".