La mala ley

Lo malo puede ser legal; lo legal puede ser malo. Nadie ignora que Hitler exterminó a gran parte de los judíos alemanes con leyes; y Franco lo hizo con los rojos aplicando leyes. Luego aplicamos otras leyes y ahorcamos unos cuantos nazis en Núremberg; los cuales no pudieron ahorcarnos por las bombas atómicas de Hiroshima y Nagasaki o por los bombardeos de Dresde o Hamburgo. (Mi forma de decir "nosotros" es solamente localización histórica. El antifascismo ha de asumir sus crímenes: el rojo sabe y asume la quema de iglesias. Lo entiende aunque lo deteste). Vuelo lejos cuando me limito a un aforismo vulgarcillo: lo malo es legal, lo legal es malo, según quién redacte, enmiende, aplique, recurra, defienda o acuse: y según quién juzgue. Es legal que el Ministerio de Defensa prohíba el acceso a la prensa en la base militar de donde salen soldados a colaborar en el martirio de Irak. Debe ser legal que prohíba contar algo a los familiares de los que así marchaban. Va en contra de varias libertades: de prensa, de información, de comunicación. De derechos humanos. Pero toda ley va en contra de alguna libertad, sobre todo las que se hacen para protegerla. El problema es que hacen suponer: imaginar una escena de soldados aterrorizados, de madres gritando "¡No te vayas, no te vayas!". Hay cuadros del XIX (voluntarios a la guerra de África) que nos permitirían imaginar este XXI: el problema de Trillo -tiene tantos que no puede ya resolver ninguno y prefiere crear otros- es que debió imaginar algo parecido, o proclamas de "¡Guerra, no!".

Es legal que los dos truhanes mayores del reino, Tamayo y Sáez, vayan a ser consejeros de Caja Madrid durante seis años aunque su acta sólo dure seis meses. La ley que quería aplicar la izquierda según otra (el pacto contra el transfuguismo, que tampoco tiene verdadero rango) fue derrotada por el PP en la Asamblea, donde tiene la mayoría gracias a esos dos. Estómagos agradecidos. Y previsión. Si priva a éstos de prebendas y beneficios, y diezmos y primicias, ¿cómo van a conseguir otro, o diez, cuando los necesiten? En Madrid, o en Marbella. En el País Vasco...

(Se luchó contra las leyes inicuas mediante revoluciones que se perdieron. Y mediante la introducción de otras leyes penales, garantistas, favorables al acusado, etcétera. Siglos de lucha a favor de la sociedad civil. Aznar las vuelve atrás. Lo que detesta no es el terrorismo ni el comunismo, sino la Revolución Francesa. La Ilustración, las Cortes de Cádiz).