Controlado el incendio del Bages que ha quemado 388 hectáreas

El incendio forestal de Castellbell i el Vilar (Bages) quedó bajo control ayer por la tarde, aunque los Bomberos de la Generalitat no lo consideraban aún extinguido porque en la zona había puntos donde las llamas podían reproducirse. De hecho, durante la mañana aún se tuvo que actuar para sofocar tres focos de incendio. Las causas no se conocen todavía. Los agentes rurales del Departamento de Medio Ambiente trabajaban sobre la doble línea de un incendio provocado y del fuego causado por una conducta imprudente.

El peor incendio forestal de lo que llevamos de verano en la Cataluña central se ha saldado con un total de 388 hectáreas quemadas. La primera columna de humo se advirtió en la zona próxima a la casa de Cal Pinsà, pero el punto exacto del origen parece ser en la fuente del Sentó, cerca de la riera de Marganell, donde vecinos de la zona acuden a menudo a limpiar sus vehículos o a hacer alguna comida campestre.

Fuentes de los bomberos y de las Asociaciones de Defensa Forestal, que en Bages actúan de forma coordinada, aseguraron ayer que a media tarde se temían lo peor y de ahí que se incorporasen a las tareas de extinción dos hidroaviones del Ministerio de Medio Ambiente, con una capacidad de carga de 11.000 litros en cada aparato. El principal frente del incendio se aproximó de forma peligrosa hacia las urbanizaciones de Can Xesc, Mas Enric y Mas Planoi, con casas que se encuentran rodeadas de bosque. Los jardines de cinco fincas quedaron afectados, aunque el incendio no llegó a las viviendas; sólo una casa deshabitada, Can Ferran, ardió completamente. Estas urbanizaciones fueron desalojadas, pero sobre las nueve de la noche volvieron a quedar ocupadas. Los bomberos mantuvieron ayer 30 vehículos y durante la mañana un helicóptero que seguía remojando la zona.