"Las cuotas han sido útiles para superar las trabas"

La que pasa por ser la alcaldesa más joven de España, 24 años, está en política por las cosas que pasan en los pueblos. Hace cuatro años Rosario Cruz, Charo para todo Coripe, estudiaba Magisterio en Sevilla, en la rama de Educación Especial, y en vacaciones trabajaba en el bar de la piscina municipal. Allí leía el periódico y comentaba la actualidad general y los problemas del pueblo con un teniente de alcalde que, llegado el momento de hacer las listas, se acordó de aquella joven de ideas claras. Fue en el número 3 de la candidatura del PSOE en 1999, pero en enero de 2002 tuvo que sustituir al alcalde, que dimitió por motivos personales.

"Si me lo dicen hace cinco años era una locura, nunca pensé en meterme en jaleo, pero me lo propusieron y he descubierto un gusanillo, ahora no paro de meterme en cosas", cuenta. Asegura que en el medio rural las mujeres aún tienen más dificultades para dedicarse a la vida pública, pero dice con orgullo que en su comarca hay tres candidatas a alcaldesa. Cuenta como anécdota que en cierta ocasión un hombre fue a exponer un problema al secretario del Ayuntamiento, "porque de ninguna manera le podía contar ese asunto a una mujer". "Hay gente a la que le cuesta mucho trabajo aceptar que una mujer sea alcaldesa", reconoce.

Asegura que las cuotas "han servido para que la mujer se incorpore a la actividad pública. Seguramente no es justo que esté por cuota quien no sirve, pero han sido útiles porque aún hay muchas trabas y hay mucha gente que no es capaz de ver la capacidad de la mujer ni quiere dejarnos paso".

Dice estar dedicada las 24 horas a la alcaldía y que es fácil porque está soltera. "Sé que el día que tenga una familia tendré que quitarme peso, hay que compartir las cargas".