Los usuarios dan un suspenso a los sistemas de salud en información, papeleo y tiempos de espera

Dos tercios de los ciudadanos (el 66,1%) opinan que los servicios de salud funcionan "bien o muy bien", según el Barómetro Sanitario de 2002 elaborado por el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), que presentó ayer la ministra de Sanidad, Ana Pastor. En conjunto, los usuarios dan al sistema un 5,94 sobre 10. Curiosamente, los suspensos otorgados, según los usuarios, no son para el personal, las atenciones o prestaciones, sino para la organización. Según la encuesta, que se hizo a casi 7.000 personas en el periodo que va de abril a noviembre del año pasado, lo peor es la información de los sistemas sanitarios públicos. En este aspecto suspenden todos los apartados: los que se refieren a conocimiento de los servicios ofrecidos (un 4,57), la información sobre el procedimiento para tramitar una consulta con un especialista (4,84), y los derechos y mecanismos para reclamar (un 3,86, la nota más baja).

Tampoco llegan al aprobado los trámites para conseguir cita en la atención especializada (4,89 sobre 10), el tiempo de demora para un ingreso no urgente (4,11), y el tiempo de espera para entrar en consulta del especialista (4,99). Este último aspecto también es el peor en la atención primaria (un 5,42). Sobre las listas de espera, el 46,6% opina que están igual que hace un año; el 27,1%, que están mejor, y el 9%, que han empeorado.

La falta de continuidad en el tratamiento entre atención primaria y especializada, que fue resaltada por la ministra, hace que más del 60% de las personas que acuden a urgencias lo hagan porque no tienen en ese horario servicio de atención primaria, porque no saben cómo acceder a él o, simplemente, porque con ello se evitan trámites.

Según la encuesta, son mayoría los ciudadanos que creen que la calidad de la atención recibida depende de dónde viven, y que es diferente entre comunidades autónomas y, sobre todo, que es peor en las zonas rurales. En cambio no parece importarles mucho quién preste la atención. Sólo el 55% de los habitantes de las comunidades del antiguo territorio Insalud saben hace 15 meses que se transfirió la sanidad.