La plantilla de una empresa va a la huelga tras diez años de vejaciones de un superior

Los trabajadores de la empresa de automoción Spicer Ayra-Cardan, sita en Itziar (Guipúzcoa), fueron ayer a la huelga, hartos de soportar desde hace diez años "el acoso moral, las discriminaciones, coacciones, vejaciones e insultos" de un mando intermedio de la planta, el gerente de una sección de montaje.

La protesta de 24 horas fue respaldada por el 98% de la plantilla de la firma, en la que trabajan 196 personas. Los empleados, que tienen previsto repetir la huelga el próximo día 27, se concentraron al mediodía ante la fábrica tras una pancarta con el lema No a la discriminación. No a la coacción. No al acoso laboral.

Las malas relaciones entre el gerente y los empleados a sus órdenes, unos 40, vienen de lejos. El comité de empresa se ha quejado muchas veces a la dirección, sin obtener una respuesta.

"La dirección reconoce que hay un foco de tensión" debido al trato del gerente, pero "no aporta una solución, como le correspondería", manifestó ayer un miembro de la ejecutiva comarcal de UGT. Cuatro delegados de esta central, tres de ELA, uno de CCOO y otro de LAB forman el comité de empresa. Cansados de "chillidos, insultos y discriminaciones", el comité decidió la semana pasada tomar "medidas de presión" hasta que la dirección aporte una solución.