Una vacuna de caballo
Éramos unos 2.000, o pocos más, o pocos menos, los que el sábado último nos manifestamos en Valencia contra la privatización de la televisión autonómica. En todo caso, una facción meramente testimonial de la audiencia de RTVV, ese millón de moscas que se atiborra de Tómbola o de cualquier otra porquería parecida. Verdad es que casi todos, uno por uno de los manifestantes, era una biografía política andante y superviviente de la transición o de mucho antes. Incluidos los estudiantes de periodismo, que se sumaron a la protesta y distribuían un alegato tan razonable como lírico a tenor de las circunstancias. Quiero decir a tenor de la fatalidad que se cierne sobre el ente televisivo, condenado a ser entregado o desguazado entre uno o varios adjudicatarios de su rejilla.
Fui uno de ellos, repito, porque creo que este País Valenciano necesita una televisión pública coherente con los motivos que impulsaron su fundación, a pesar de las reticencias de los jerifaltes del PSOE cuando a comienzos de los 80 se concibió el proyecto. Ya se sabe: la recuperación de la lengua, la vertebración de la comunidad, la promoción de los talentos y la movilización de las energías colectivas, etcétera. Es un medio demasiado poderoso como para dejarlo al albur o en manos privadas exclusivamente. Ni siquiera en manos partidarias o políticas, como ha venido aconteciendo con no mucha diferencia gobernando unos u otros. Tampoco deja de ser significativo que los profesionales del ente marginados en su día por los socialistas sean los mismos, prácticamente, que los enviados al ostracismo por el PP. En ese aspecto, ambos partidos mayoritarios comparten igual criterio profiláctico: lejos de nosotros los periodistas.
De una gestión privatizada, como se propende, no es esperable que se atiendan las viejas e inéditas reivindicaciones, ni que de pronto nos sorprendan con una televisión homologable a la catalana -la mejor de España, con creces-, ni siquiera se atisba la fórmula mediante la cual este cambio gestor liquide el déficit económico que asola el medio. Las instancias responsables del PP no han sido muy explícitas al respecto, e incluso causa pasmo el mutismo e indefinición que practican cuando se les inquiere. Diríase que este asunto no incumbe a la Generalitat, sino a otras y lejanas instancias que, ciscándose en el pueblo soberano, están conjeturando entre la oportunidad y la especulación.
Pues bien, a pesar de esta declaración de principios y de todos los reproches anotados, pienso sinceramente que si ese tinglado de Burjassot, por no hablar de la radio autonómica, tiene una expectativa de remedio es privatizándolo con la finalidad de sanear su cuenta de explotación y racionalizar sus métodos de gestión. Abundar en el anacronismo en el que está instalada no puede conducir más a degenerar sus vicios crónicos. A la postre, no sugerimos otra cosa que el viejo apotegma revolucionario de "cuanto peor, mejor". Al fin y al cabo, las sucesivas tandas de políticos y programas no han hecho más que ahondar el problema original, parido por demócratas tiernos e inconsistentes. Tan sólo después de asimilar esta vacuna de caballo quizá sea imaginable una TVV pública y de calidad, ese desiderátum tanto más mortificante para cuantos pensamos -aunque sin pasión- que es posible y, sobre todo, necesario.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Archivado En
Últimas noticias
Hallado muerto un hombre con heridas de arma blanca en Molins de Rei (Barcelona)
Nueve muertos y al menos diez heridos en un tiroteo en Sudáfrica, el segundo en 15 días
El brevísimo despertar y repliegue de la generación Z en México
Podcast | ¿Es Lucho Bermúdez el democratizador de la música en Colombia?
Lo más visto
- Uno de los promotores de la señal V-16 de tráfico: “Es duro oír el testimonio de víctimas que han sufrido amputaciones al poner los triángulos”
- Más de 40 congresistas demócratas piden por carta a Trump que cese en sus “intentos de socavar la democracia en Brasil”
- Cae una organización que enviaba camiones cargados de cocaína desde Marbella hasta varios países europeos
- La policía registra varios domicilios y las oficinas de la ministra francesa Rachida Dati por otro presunto caso de corrupción
- Manuel Castells, sociólogo: “El mundo está en un proceso de autodestrucción”




























































